Francisco Ventoso (1982) es uno de los ciclistas españoles sin dorsal para el año que viene. Después de cuatro temporadas en el Movistar Team, el ciclista cántabro recibió la baja a finales de septiembre. “El mercado está bastante mal”, asume. Él se mantiene con la “ilusión de un niño pequeño” y apurará sus opciones de continuar en el pelotón. “No me gustaría tener que colgar la bici porque creo que todavía tengo cuerda”, destaca.
En el palmarés de Ventoso destacan dos etapas en el Giro de Italia, una etapa en la Vuelta a España, el Campeonato nacional en 2012, una clásica como la París-Bruselas, seis etapas de la Vuelta a Castilla y León, dos en Andalucía y una en el Tour Down Under. Una trayectoria que parece que se ha olvidado. “El ciclismo muchas veces es muy ingrato”, afirma a BiciCiclismo. Debutó en el Saunier Duval (2004-2007) para pasar después por el Andalucía (2008) y el Carmiooro (2009-2010) hasta recalar en el Movistar Team (2011-2014). Este año se congratula al menos de haber vivido “algo único e inolvidable” con el triunfo de Nairo Quintana en el Giro de Italia.
¿Cuál es su situación a día de hoy?
No tengo nada y es complicado que salga algo, hay muchos corredores buenos sin equipo. El mercado la verdad es que está bastante mal. No me gustaría tener que colgar la bici porque creo que todavía tengo cuerda, pero la situación es complicada, complicada, después de sacrificar todo el año mis opciones por trabajar para Valverde en las clásicas, para Nairo (Quintana) en el Giro y para Lobato en la segunda parte de la temporada.
¿Se esperaba la baja del Movistar Team?
Por cómo se han desarrollado un poco los acontecimientos, me lo podía esperar; lo que no me esperaba es que te lo digan a finales de septiembre. Yo entiendo la decisión, pero que te lo digan un poco antes para que te puedas buscar un poco la vida. Si te lo dicen en mayo, después del Giro, es más fácil encontrar un equipo. Después del Mundial, es bastante más difícil.
Como dice, el mercado está difícil…
Los equipos de cara a la nueva modificación que viene están reduciendo corredores y entre eso, fusiones, equipos que van a salir y no salen… No soy el único, hay muchos corredores en el mercado, sin hueco y sin equipos a los que ir. Simplemente no hay sitio. Y los equipos qué van a hacer, esperar, algo normal; si yo tendría un equipo, haría lo mismo. Es la situación que nos ha tocado vivir y hay que apechugar. Es una pena, solo hay dos equipos (Movistar Team y Caja Rural-RGA), para los que estamos dentro, pero aún es peor para las categorías inferiores. La verdad es que el panorama es oscuro, así que es normal que haya tan poca base.
Pero no ha perdido la ilusión por continuar.
Yo sigo con muchísimas ganas. Yo creo que lo que se me ha pedido lo he hecho; lo volvería a hacer exactamente igual. He trabajado, y lo he hecho encantado, y además con resultados que sabe mejor. Mi año ha sido bueno, he estado dónde tenía que estar, incluso más allá en el Giro, llegando más delante de lo que se me pedía. Las ganas y las fuerzas están intactas: mi ilusión es la de un niño pequeño. Mientras me guste la bici, y tenga un calendario, seguiré.
Las dos últimas temporadas especialmente se ha dedicado a trabajar para sus líderes, y eso no siempre se ve y es apreciado.
El ciclismo muchas veces es muy ingrato y la memoria suele ser muy pequeña o se olvidan las cosas muy rápido. Tampoco me pilla de sorpresa. He pasado por situaciones y circunstancias bastantes peores que esta y sé lo que es. Seguiré intentado buscar en lo que queda del año porque me gustaría estar en el pelotón el año que viene. Si sigo me encantaría; pero si no es así, también tengo claro que no se acaba el mundo y que hay otra vida. Son periodos. Si no sale nada, empezaré a pensar en otros proyectos que tengo pendientes.
Entiendo que sigue haciendo vida de profesional.
Sí, he estado unos días de descanso y acabo de empezar el gimnasio y poco a poco seguiré con la preparación. Tengo una fecha pensada, final de año, y hasta entonces haré las cosas como si tuviese equipo, como las venía haciendo hasta ahora.
Este 2014 le queda el haber vivido la victoria de Quintana en el Giro de Italia.
Pienso que he hecho un año bastante bueno, al principio con muchos puestos y muy cerca de ganar (2º en San Luis y Mallorca, 3º en el GP Nobili y 4º en Almería) y después trabajando. En 11 años de profesional, nunca había vivido ganar una Grande y la verdad es que formar parte del nueve es algo muy especial. Además, el equipo del Giro fuimos una piña, trabajamos muy bien. Es algo que te hace sentir orgulloso de tu trabajo y es algo único, y para mí fue precioso e inolvidable. Y eso que me llamaron tres días antes para ir a correr y aun así fui competitivo desde el inicio hasta el último día. Y lo puedo entender porque eran siete fijos y a última hora llaman a los que más en forma están. En cualquier caso, estoy realmente muy agradecido por los cuatro años que he estado en el equipo.
Fuente : Biciciclismo
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